¿Por qué subimos de peso en cuarentena?

Si en esta cuarentena sientes que comes igual que antes, pero no dejas de ganar peso, esto se puede deber a que tu rutina ha cambiado pero tus hábitos alimenticios no. 

Desde antes de la llegada del Covid-19 a nuestro país, los mexicanos ya teníamos un problema con la alimentación. De acuerdo con INEGI, 6 de cada 10 mexicanos no realiza ninguna actividad física, y no ha reducido su ingesta diaria de calorías.  

Una de las principales razones del sobrepeso y obesidad en el país es el desequilibrio energético; esto quiere decir que consumimos más calorías de las que gastamos a través de la actividad física. 

En promedio, cada mexicano consume alrededor de 3,200 calorías diarias, mientras que la recomendación de los expertos, como la OMS (Organización Mundial de la Salud) recomienda una ingesta de 2,000 calorías promedio; y esto es sin tomar en cuenta el sedentarismo que la pandemia ha provocado recientemente. 

Y es que la dieta de los mexicanos está repleta de deliciosos carbohidratos y grasas, tanto en sus ingredientes como en la preparación de estos. La comida frita, capeada o empanizada aumenta sustancialmente las calorías que consumimos, y para muchas personas representan 2 de cada 3 comidas del día. 

El problema se agudiza si consumimos estos nutrientes en exceso y sin ningún tipo de actividad física a lo largo del tiempo; lo que da como resultado sobrepeso y obesidad. Y aunque la mayoría de las personas sabemos que esta es una importante razón por la cual subimos de peso, existen otros factores que contribuyen al problema.

Uno de estos es la falta de educación en salud y nutrición. Muchos mexicanos tenemos la creencia de que debemos comer hasta sentirnos satisfechos, pero la realidad es otra. Moderar el tamaño de las porciones es parte importante de la pérdida de peso. 

Además de esto, la salud física, mental y la genética familiar también influyen en la posibilidad de sufrir padecimientos crónicos como diabetes e hipertensión. 

Por eso es tan importante tratar la salud como algo integral, que compone todas las partes de nuestro cuerpo. Atender la salud mental, aumentar la actividad física y estar alertas a padecimientos que pudimos haber heredado son pilares fundamentales para mantener un peso saludable. 

Así que si en estos meses tu peso ha aumentado, no busques remedios mágicos. Observa tus hábitos, aumenta tu actividad física, disminuye tus porciones y pide ayuda si la necesitas. Tomar buenas decisiones día a día te ayudará a dar los primeros pasos hacia una vida más sana.