¡Hacer pis en la ducha! Cuándo sí y no aunque sientas ganas de orinar

La hora de la ducha es ese momento de relajación en el que puedes dejar atrás las preocupaciones y el cansancio del día. Pero, ¿alguna vez te has preguntado si está bien orinar bajo la regadera? ¡Vamos a explorar juntos qué sucede en tu cuerpo si decides hacerlo!

Tal vez hayas oído diferentes opiniones sobre si es higiénico o no. Pero, ¿qué dicen los expertos y cuáles son los hechos detrás de esta práctica?

¿La orina se impregna en el piso de la ducha?

En primer lugar, ¿te preocupa que orinar en la ducha ensucie el baño? Bueno, aquí tienes una buena noticia: la orina no se queda pegada en el suelo, y tampoco daña el piso de la ducha, sin importar de qué material esté hecho.

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De hecho, algunos expertos sugieren que hacer pipí mientras te duchas podría ayudar a ahorrar agua. Piénsalo de esta manera: si estás en la ducha de todos modos y dejas que el agua fluya, ¿por qué no aprovechar para hacer tus necesidades? De esta forma, estarías usando menos agua al no tener que tirar de la cadena del inodoro.

¿Qué hay dentro de la orina?

Bueno, nuestros riñones son los encargados de producirla. Filtran los desechos y el exceso de agua en la sangre, lo que forma la urea. Además, la orina contiene otras sustancias como amoníaco, componentes de la bilis, creatinina (un producto de la degradación muscular), sales y urocromo, que es un pigmento que le da su característico color amarillo o ámbar, describe la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos. 

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Riesgos si decides orinar en la ducha

1- Riesgo de infecciones: Aunque la orina es generalmente estéril, en algunos casos puede contener microorganismos que podrían causar infecciones del tracto urinario (ITU). Estas infecciones pueden afectar a los riñones, uréteres, vejiga y uretra, y no son nada agradables.

2-Debilitamiento de los músculos del suelo pélvico: Cuando orinas en la ducha, es probable que te encuentres de pie. Esto evita que la vejiga se vacíe completamente, lo que podría debilitar los músculos del suelo pélvico, incluyendo los del cuello uterino, útero y vagina. Un suelo pélvico débil puede aumentar el riesgo de incontinencia urinaria.

En resumen, la elección de si orinar en la ducha o no depende de ti, pero es importante estar consciente de los posibles riesgos. Si decides hacerlo, asegúrate de mantener una buena higiene y de limpiar la ducha regularmente, ya que la humedad puede propiciar el crecimiento de hongos.